Pazear: Un proyecto alternativo de descanso y relax en la naturaleza

L. Á. Aguilar

Sí, no es ninguna errata, y aunque en Andalucía o América latina lo pronuncien como ese verbo intransitivo que nos refiere ir a pie, paZear es un nuevo concepto inventado por Maderas Nobles de la Sierra de Alcaraz (MNSA) para desarrollar una nueva forma de entender el turismo rural, intentando volver a su sentido original, a través del llamado Movimiento Slowfoof, que sugiere vivir más despacio en este acelerado modelo de vida que nos domina.

PaZear es ir al campo con el respeto necesario a los equilibrios naturales en paz, con pasión y con paciencia. Es vivir, pasear, dormir mirando las estrellas, descansar, encontrar la manera de fundirse con la naturaleza en la sencillez y en el uso racional y sostenible de los recursos.

No es pura teoría, ni es un negocio más; es un proyecto ya iniciado que incluye la restauración de dos cortijos habilitados con técnicas de bioconstrucción con el fin de respetar al máximo el entorno y el concepto citado. Y todo ello en plena Sierra de Alcaraz (Albacete).

El concepto “paZea” incluye la creación de actividades con las que tentar a los posibles clientes, que van desde la plantación de árboles al turismo ornitológico, pasando por la elaboración de huertos slowfood, la agroecología o la confección del nendo dango.

Para saber más puedes consultar en www.mnsalcaraz.net donde verás los cortijos de Cortes y la potrera o un vídeo explicativo muy interesante.

MNSA es una empresa que nace de esa factoría de alternativas sostenibles y ecológicas que se conoce como Maderas Nobles de la Sierra de Segura (MNSS), una empresa fundada hace más de una década por Juan Valero en Riópar (Albacete) que se dedica a la silvicultura para producir madera de gran valor, a compensar las emisiones de CO2 y a crear una barrera para combatir la desertificación y el cambio climático. Conocidas y publicadas en The ecologist, National Geographic, revista forestal española o El País, son no solo la venta de sus lotes de árboles (nogales, castaños, paulonias…), sino su Fundación +árboles, o su concepto de responsárbolidad que venden a las empresas con lo que han podido forjar productos que generan vida y riqueza a la vez. Y todo ello sin olvidar los cuatrocientos mil árboles plantados con criterios de permacultura, que crecen en esas fincas manchegas y que están cubriendo unas expectativas cada vez más cercanas a la producción de madera y bosques recuperados. Eso además de lo que supone el invertir en árboles, que de las manos de Triodos Bank y MNSS supone una apuesta ecológica para este milenio.

Señalar también una de las actividades de la Fundación +árboles del año pasado con la que MNSS rindió homenaje al campesino y maestro japonés Masanbu Fukuoka para seguir impulsando esa nueva cultura del árbol. Fukuoka, como recordó su principal discípulo griego Panos Manikis, ponente del curso, fue quien en los años 60 sentó las bases de la agricultura natural –también llamada del “No hacer”– defendiendo la mínima intervención humana. El taller de nendo dango del que hablamos no es sino un método de reforestación que consiste en sembrar semillas envueltas en arcilla.

Como explicaba nuestro amigo Juan Valera “hasta ahora se decía que los árboles preceden a las civilizaciones y a éstas les suceden los desiertos. Sin embargo, una nueva conciencia ecológica está intentando, entre otras cosas, frenar la desaparición de los árboles de nuestro planeta. ¡Que lo veamos pronto!

Deja una respuesta